La temperatura de servicio puede llegar a tener una imfluencia mayor en la resistencia a largo plazo de las mezclas bituminosas que el grado de envejecimeinto. Debemos tener más en cuenta los efectos de la temperatura en el diseño de materiales y pavimentos bituminosos.
Las mezclas bituminosas son materiales visco-elásticos cuyo comportamiento mecánico se encuentra altamente influenciado por la temperatura. Además, durante su vida de servicio, estos materiales sufren un proceso de envejecimiento que incrementa la rigidez del ligante, provocando un cambio en la respuesta de la mezcla. Ambos factores están íntimamente ligados a las condiciones climatológicas a las que los pavimentos asfálticos están sometidos, y por tanto la resistencia a largo plazo de las mezclas bituminosas dependerá de la región en la que sean utilizadas. El presente artículo se centra en evaluar el efecto que la temperatura de servicio y el grado de envejecimiento tienen en la resistencia a fisuración por fatiga de estos materiales. Para ello, se lleva a cabo una correlación entre la respuesta reológica del ligante y el comportamiento mecánico de la mezcla. Los resultados obtenidos ponen de manifiesto que el envejecimiento del ligante tiene consecuencias negativas en la resistencia a largo plazo de las mezclas bituminosas, no obstante, su impacto varía en función de la temperatura de servicio, llegando a ejercer una influencia más significativa esta última variable.
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